Muchos de vosotros sois felices con vuestras obligaciones colegiales. Aquà mamá lo lleva fatal, dice que la tarea es para mà y eso de abrir un libro o llevar una manualidad que pone en la circular: decorar en familia, ayudar a los peques, colaborar en la elaboración,... y notas que a esa pieza no se ha acercado ni de lejos un niño, que no ha habido vida infantil y seguramente ni siquiera sabe que estaba en la cartera hasta que lo han visto al sacarlo de la cartera... Pues eso no vale en esta casa. Me toca pringar a mÃ.
En el plan del año tenÃamos dos grandes hitos historicos: la visita de Muna y la llegada del libro viajero. Las dos por supuesto llegaron por sorpresa y fines de semana poco correctos.
Muna llegó justo el fin de semana que mis padres no estaban en casa y tenÃa que pasar un dÃa con los abuelos. Es decir, ¡Que le den a Muna! Que digo yo que ¿era tan complicado preguntar o saltar a otro ser vivo pequeñajo? Pero vamos, muy estoicamente el domingo Muna vino a jugar, a comer, a montarse en las motos de agua y a cenar, que no voy a ser el único que le de lo mismo tener la mascota. No habÃa que hacerle un record de cosas asà que el muñeco se quedó en casa tan a gusto.
Y el libro... ohhh, el libro... El libro viajero. Otra fascinante aventura. lo mandan a casa los viernes en riguroso orden alfabético. Asà que como me dio por coger una conjuntivitis ese viernes el lunes me soltaron con el libro y una nota en la agenda: "Devolver antes del jueves". Genial. Al menos nos dieron un dÃa más porque en teorÃa era el miércoles, en el fondo somos afortunados. Porque... ¿Y lo de dárselo el viernes a la niña/o que le tocase y hacerlo la semana siguiente? Eso quitarÃa emoción a la vida de mi madre, que ella está muy ociosa y como no tiene suficiente con el turno de noche y no dormir lo que necesita es tener dos dÃas para hacer el dichoso libro. Pero ahà donde la veis ese sistema de dejarme hacer las cosas y delegar hizo que fuera sencillo. Simplemente me dio el material y me dejó hacer la hoja tranquilito.
El libro viajero es un libro muy guay que tienes que rellenar una página diciendo donde te gustarÃa ir. Estoy un poco obsesionado con Lisboa desde que fuimos y también quiero ir a Londres asà que me empeñé en hacer las dos, y eso se soluciona con washi tpae de toda la vida.
Da lo mismo que las instrucciones pusieran claramente que el trabajo fuera para niños, niños de 3 años, recoremos, aquà en mi clase los destinos eran tan surrealistas como Costa Rica (os reto a poner el dedo en el mapa y decirme donde está Costa rica), Nueva Zelanda, ... Y supongo que la cosa habrá mejorado con los siguientes padres motivados, todo lleno de purpurina, fotos y pegatinas perfetamente simétricas, letras de gomaeva y demás cosas de moda scrap. Según las apuestas familiares el niño que más cerca estuvo del libro fue a 15 metros mientras su madre lo decoraba.
Pues mi hoja será la más rococó pero al menos es mÃa, y no veas como mola...
¿Y vosotros? ¿Cual es vuestra mascota? ¿Le hacéis algo especial? ¿Y los libros viajeros? ¿Os lo han dejado tocar los papis?
10 Comentarios
Como madre no me ha tocado pero como tia si y hay veces q alucino. Parece una competición de padres x hacer el plan más chulo con la mascota...ridiculo! Igual q el tema de q los padres ayudando en los deberes... me parece genial q sea el más rococó pero es suyo, eso es lo importante ;)
ResponderEliminarMe encanta muna!!! Vaya mascota chula que tenéis!!!! A villa frutitos también han llegado mascotas y libros viajeros y como a ti a los frutitos les toca remangarse las mangas y nosotros ayudamos. 😊
ResponderEliminarAquà ya lo tuvimos el año pasado en la guarde. Intentamos que ella participara, pero dentro de sus posibilidades claro. Pegando pegatinas a tuti, jajajajaja... La mascota del año pasado era el Hada Colorin y este año hemos tenido a Suso, una especie de señor mayor algo raruno. Al menos nos hemos librado del libro viajero, jajajaja
ResponderEliminarJajajajaja... ¡¡cómo comprendo a tu Santa Madre!! (sÃ, asà con mayúsculas)
ResponderEliminarLo que no termino de entender es el afán que tenemos los adultos por meter las manitas en lo que deberÃan hacer los niños porque una cosa es ayudar y otra bien distinta es hacer lo que a veces hacemos... aiiinnss...
Paula solo tuvo mascota en último curso de guarderÃa, se la dejaban el fin de semana y hacÃamos fotos de lo que hacÃa con ella. Después hicimos un collage con ellas y describimos el fin de semana.
ResponderEliminarAhora que es más mayor si ha hecho un álbum de su último viaje, ella lo decora y escribe, y se lo ha pasado genial haciéndolo.
Lo cierto es que el cole nos ha pedido pocas cosas asÃ, sale más de nosotros y a ella le encanta.
Saludos!
Jjaaj yo el año pasado que era el primero de cole, estaba emocionadisima con la idea de tener en casa la mascota y el libro. A mi estas cosas me encantan. Que harÃas tu sin el peque para que te saque las castañas del fuego jaja
ResponderEliminarUf lo del libro del viajero es un tema aparte. A mi también me llego la semana menos oportuna, justa cuando tenÃa un trabajo urgente y tenÃa que quedarme hasta tarde.
ResponderEliminarY lo peor era ver las hojas de los demás niños. Con esas madres súper mega motivadas que parece que habÃan hecho un curso intensivo de ART ATTACK.
En ese momento es cuando reunÃas las fuerzas necesarias para que la hoja de tu hija estuviera a la altura de las demás.
En fin, historias de madres
Nosotros el primer año de cole también tuvimos mascota y libreta. La verdad es que el tema de la mascota entiendo que a ellos les guste pero lo de la libreta creo que seria mejor cuando ellos supieran leer o escribie. En nuestro caso yo fui la que escribà y mi hija hizo unos dibujos. La verdad es que me dan pereza las cosas que se ve claramente que tienen que hacer los padres
ResponderEliminarNunca habÃa oÃdo hablar del libro viajero, muy interesante.
ResponderEliminarEn el cole no tenemos nada de eso, bastante mascota hay ya en el hogar XD Pero al final es verdad, son cosas que acaban haciendo más las madres y padres a estas edades xDDD
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