Como sabéis aquà mi señora madre se gasta un presupuesto en zapatos porque necesitamos tener los pies bien monos y agarrados por un problema de pisada de mi tierna infancia. Ha cogido la manÃa de comprar zapatos de esos de punta en blanco y al final cuando a la semana se quedan hechos polvo le entra la risa floja de loca de pelÃcula. Las zapatillas son aún peor, ellas se llevan las frenadas de bicis, patinetes y demás. Además son las preferidas para trepar y escalar modo libre asà que normalmente a la primera puesta ya han perdido todo el lustre y parte de las gomas de protección. Por eso es más barato llevarme en chanclas que comprarme zapato cerrado, a este paso me van a sacar en escarpines de piscina al parque.
Pero hemos probado Footbrake que son unas punteras especiales diseñadas por una emprendedora, qué digo emprendedora, ¡una visionaria! El producto, no por ser simple es menos brillante, se trata de unas punteras para pegar sobre el zapato y protegerlo de futuros daños. Las punteras las ha creado con un material que aguanta carros y carretas y el sistema de sujección es brutal. Os cuento. Lo primero tiene colores a aburrir y muchos diseños. Seguro que alguno de ellos se adapta a esas zapatillas nuevas pero destrozadas de tu canijo. Los puedes ver en la web https://footbrake.es/
Una vez seleccionas el diseño y color haces tu pedido que te llega a casa en una bolsita con un montón de pegamento. Sigue las instrucciones que depende del material que sea el zapato o zapatilla a arreglar. las zapatillas estándar simplemente tienes que recortar para que se ajuste la puntera a la zapatilla en cuestión y proceder a aplicar en el zapato y en tu footbrake pegamento.
IMPORTANTE. Una vez realizada esta operación se debe esperar una horita antes de proceder al pegado. Si la puntera y el zapato están secos y no son pegajosos se puede proceder a unirlos. De una esquinita hacia el centro presionando con fuerza y movimientos fuertes. Y una vez ajustado... ¡Perfecto!
Deja secar bien,unas 48 horas, y a disfrutar.
Nosotros hemos decidido probar a lavar las zapatillas porque a parte de destrozar tengo una habilidad incuestionable para que se me caÃda todo sobre las zapatillas. Asà que mi madre que es un desastre decidió seguir el sistema tradicional y lavarlo en la lavadora. Usó un programa corto de 30 minutos con agua frÃa y lo lavó junto con las toallas para que no se dañase la zapatilla ni la ropa. No se han despegado y están perfectas. Asà que más cómodo imposible.
La verdad es que si tienes un pequeño destructor es una compra que merece la pena, se puede reparar o incluso alargar la vida de calzado nuevo, quedan muy bien y son muy divertidas. E incluso para zapatos de adultos son muy resultonas.
Descubre más sobre ellas en su web o preguntarme que soy ya todo un experto. Cuestan menos de 6 eurillos y si mi madre ha sido capaz de ponerlas. ¡¡Tú también!!
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