Japan Weekend Febrero 2022. Más grande, más bestia... ¡Mejor!

Llevamos ya muchos años asistiendo a las celebraciones de la Japan Weekend. Desde que se hacían en la casa de campo, ¡Anda que no ha llovido! Para los neófitos la edición "normal" de la Japan se hacía en el mes de septiembre y luego surgió la idea de organizar una en febrero, una época en que artistas y artesanos tenían un pequeño bajón en su actividad tras los gastos de navidad. De esa forma nació una edición más pequeña y recogida que era denominada la "Little Japan" entre los aficionados. Pero esta edición ha demostrado que la Little Japan se ha hecho grande, diría que se ha hecho gigantesca y por mérito propio. ¿Quieres saber qué escondía esta última edición?

La más grande hasta la fecha.

La Japan Weekend es el punto de encuentro para todos los amantes de la cultura japonesa y asiática en general ganado terreno la cultura coreana en los últimos años. Un espacio donde conviven artistas, creadores, ilustradores, escritores y artesanos con grandes nombres y divulgadores de este tipo de contenidos y abriendo también sus puertas a otras disciplinas como el cosplay, el cómic, o incluso en las últimas ediciones el drag como expresión artística de maquillaje y costura. Por supuesto siguen teniendo escenarios para los karaokes, los lips syncs, los concursos de cosplay y las conferencias y mesas redondas de todo tipo. Es más, son ya más de cuatro los espacios fijos más los rings de lucha y los pequeños stands que se montan en la feria por parte de escuelas de idiomas o institutos que comparten información, juegos y talleres con los asistentes de forma gratuita.

Este año los pabellones elegidos han sido en la zona central sumando tres a la convocatoria, esto la convierte en la edición más grande hasta la fecha. Además la distribución ha sido de lo más racional.

El pabellón 4 estaba copado por los Artist House (los diseñadores e ilustradores) y la zona no comercial (artesanos en diferentes disciplinas ne su totalidad). El pabellón 6 era la zona comercial ampliando sus opciones con tiendas españolas de todo tipo de productos y abriendo el espectro a nuevas posibilidades como aumentar la oferta en distribución de comida aunque, y lo decimos para que tomen nota para la próxima edición, un stand de K Beauty ya se echa en falta. Y para terminar el pabellón 8 era el destinado a las firmas, los eventos con dos de los escenarios principales de actuación y conferencias, la zona de juegos, espadas laser y circo y zona de comida.

La oferta gastronómica se dividía en dos partes teniendo dos lugares para comer en el típico, y ya establecido, puesto de comida japonesa (con dos ubicaciones) y un nuevo puesto de Mama Curry, por desgracia la afluencia de publico hizo que a pesar de aumentar los espacios comer fuera una odisea para todos. Las colas del sábado eran kilométricas dentro del recinto pero también en los foodtracks exteriores o en el Foody Hall lateral. Y sentarse también era una misión imposible. Eso, y la entrada al evento por la mañana con sus colas que daban la vuelta al IFEMA entero son puntos a mejorar para la siguiente entrega.

Pero igual que se dice lo bueno hay que reconocer que la nueva distribución era muchísimo más lógica y agradable. Encontrar las zonas era más sencillo y agrupar a los artesanos y artistas lejos de la zona comercial un acierto. Esta edición han sido MASIVA. 245 stands no comerciales y 174 en la zona del Artist House. Intentando, como en la edición anterior, mantener los pasillos más amplios para la comodidad de los visitantes y mantener las distancias de seguridad. Por supuesto las mascarillas en interiores obligatorias y se cumple a rajatabla incluso por los cosplayers que paseaban por la feria.

Cosas bonitas

Una cosa fantástica de esta edición es que los patrocinadores han regresado por lo que las entradas anticrisis han vuelto. Son uno de los reclamos de la feria. como usuarios siempre nos gusta optar por este tipo de entradas y completar nuestras colecciones de series, películas o animes.

Otra novedad es que Berlina arrimó el hombro con el patrocino de los cosplays y los ganadores de los concursos se llevaron maquinas para seguir creando estas fantasías.

Se da más importancia a las firmas invitadas con un stand en un lugar prioritario y no en zona de paso. Puestos cómodos que compartían los youtubers, ilustradores y cosplayers profesionales de la feria utilizando las cuatro caras del puesto por lo que era más vistoso y fácil de encontrar.

Las conferencias y presentaciones han seguido siendo muy variadas y multidisplinares. No ha faltado el cine, el anime, las series y el diseño en todos sus aspectos con especial hincapié en el hermanamiento del mundo drag y dando cabida al maquillaje y a la moda en esta edición. También impresionante la zona de pelucas y maquillaje corporal que estuvieron trabajando en las dos ediciones.

Más zonas para jugar, que también hacía falta. Desde el stand circense a los tatamis y la zona de espadas laser. Pero también con los videojuegos y el stand de Vodafone que encantó a los más pequeños. El pabellón 8 tenía una sensación de amplitud ideal para los grandes eventos que sucedieron en el escenario principal y donde había espacio de sobra para los asistentes.

Resultado

Ir a la Japan Weekend se convierte en un vicio confesable y además en un interesante gasto para el consumidor de este tipo de contenidos. No puedes resistirte a compara cosas que, de otra manera, requerirían un desplazamiento a tiendas especializadas. Pero además es el mejor lugar para conocer e indagar sobre la cultura asiática y descubrir gente con talento. Láminas preciosas, artesanos con mimo, todo tipo de artefactos y adornos de lo que más te guste (desde el KPop a la serie de anime de tu infancia) y, por supuesto, el sitio donde encontrarás más Narutos por metro cuadrado del mundo... Es el lugar correcto para el otaku, para el curioso y para el amante de Japón. Una vez más consolidando el legado de ser la mayor feria asiática en España. Enhorabuena por los resultados.